San Pedro y otros poemas
San Pedro
1
Mi adolescencia no ha muerto
en el estero de mi deseo
alta marea imposible, luz
del sol en mi corazón
gaviotas redimidas
en la orilla del aire
Desde mi cuarto
veo el desierto
las balsas de lisa & pejerrey
& las olas lejanas,
inexistentes sino al
cruzar la pampa de la isla
Estoy mirando los fuegos fatuos
al vagar por la senda
del recuerdo que son estos
versos escritos al lado
de la caracola subterránea
La arena se dibuja
en la canción que la noche
& su fogata con las chicas
desnuda mi inocencia,
verano de la dulzura más
linda, fresco del viento
que hacía sentirme ligero
en la baranda de la terraza
Me guardo ese dulzor
porque yo lo tuve & es
emblema de mi dolor.
2
El remanso de las olas
se recoge suavemente
cristales verde – azul en
la sinuosa quietud de la
marea humedece la arena
amanece en la playa sobre
la clarísima soledad del
aire en el montículo verdolaga
alcanza el repliegue marino
& en la noche sentados al
rededor del fuego tocaba
la guitarra & la duna
silenciosa se movía por
las luces lejanas recordada
fuente solar le prometía
en el frescor de la brisa
otra vez la transparencia
& la paz del estero hacia
la bocana donde el río
dejaba su corriente enar
decida por el sol de los
ramajes perdidos al azar
del viento & el soñado
algarrobo en las laderas
Otoño / Márgenes del río Cooper
1
Orilla crepuscular furtiva eres
la luz invadiendo el caos
abrumado por la nada & la
proximidad de la luna lejana
constante como este viento
tibio & errante en la espesura
del incierto bosque aledaño
en la hora postrimera del día
propicia a la canción del
después ya no hay memoria
ni sombra leve en la comisura
de tus labios recordados
o una lágrima corrida en
tu mejilla en el instante
final del poema escrito
en el reflejo de las ondas
& su frescura remota
como un éxtasis de
tiempos perdidos en la
región insólita fugaz
donde el prado se enternece
& duerme para siempre
2
Esta tarde es la dulzura
danza de los árboles al final
de un ahora que ya no dura
imaginario en la forma fugaz
de mi canción silente & la pa
sión por la muchacha lejos
antigua soledad que esta
dicha me depara íntima
declinación de la juventud
perdida en el hondo celeste
del cielo sobre el río o
la memoria del jazmín
cuando la luz no quiere
irse pero se irá & llena
el vacío de las horas
constantes furtivas co
mo el secreto de un
amor en el tablazo
de los sueños donde se
acumula la nada &
sin embargo este verso
persiste en poesía