Oscar Hahn. Autobiografía del inconsciente

Presentamos un texto clave del renombrado poeta chileno.

 

 

 

Oscar Hahn

 

 

AUTOBIOGRAFÍA DEL INCONSCIENTE

 

I

 

Ya no siento las mordeduras

que me hicieron las gárgolas en el pie

 

Podría caminar toda la noche en medio de las tinieblas

y llegar al Altar Mayor antes del alba

 

antes de que cante el gallo

 

Yo no conozco a los que apagaron las velas

Yo no conozco a los que escondieron los fósforos

 

pero avanzo de oscuridad en oscuridad

acosado por los hocicos de las quimeras

 

Y descubro un camino que me conduce hacia adentro

hacia el claro del inconsciente

 

que ahora se torna oscuro sin principio ni fin

 

un círculo vicioso nada más es el centro

de este espacio que nunca puedo abandonar

 

sino para salir a otro sueño a otro sueño

Tendido en un diván veo a un hombre

 

con barba negra que me hace preguntas

y le pido que me alcance la mano

 

para salir del pozo que me lance una cuerda

hacia abajo y me dice ata los cabos sueltos

 

y tendrás una soga para subir a la vigilia

cuidado con amarrártela en el cuello hijo

 

cierra los ojos olvídate del mundo concéntrate en el sitio

 

donde el espacio de la mente y el espacio del cielo se juntan

se juntan y se abren a dimensiones inconmensurables

no hay adentro ni afuera hay algo que no tiene nombre

 

primero una oscuridad atravesada de resplandores

la mente que se ensancha y se superpone al firmamento

 

 

 

II

 

Todas las noches saco a pasear a mi inconsciente

Sucede que se ahoga que no respira bien

 

Tiene unas pesadillas horribles

Sueña con Frankenstein con Drácula con la Momia

 

Pero apenas ve el sol se pone a chillar como un cerdo

y quiere regresar a mi cuerpo otra vez

 

Mi inconsciente les ladra a los gatos

y a los perros que se le ponen por delante

 

Y sobre todo a las hormigas las minuciosas hormigas

 

Hoy día mi inconsciente se fue de paseo a la playa

y se tendió frente al mar con su traje de baño de los años 20

 

Recuerda un reloj devorado por las hormigas

recuerda pelos en la palma de la mano

 

y recuerda a las hormigas alimentándose de esos pelos

tan diminutas las hormigas tan duras tiene rabia

le dan ganas de aplastarlas como si fueran insectos

 

Los deshollinadores quieren entrar en mi inconsciente

matarme las hormigas limpiarme los pelos

 

sacar el hollín que se acumula

desde que estamos en el vientre materno

 

Pero sin hollín mi inconsciente no es nadie

Es un hoyo en el vacío un esqueleto sin huesos

 

No me toques el hollín oye

 

Mi inconsciente es una iglesia en llamas

con sus curas sus beatas y el altar

que es una cama donde arden como locos