Mi reflejo en el paisaje lacustre que ahora nos mira
Del libro Animal (2017)
Materialidad
He lamido por largo tiempo
al cachorro
Parece que sólo así
sus músculos
se acostumbran al aire
y sus formas
dejan de ser arbitrarias
He golpeado
a los adultos
que se acercan a olfatearlo
o quieren tomarlo
en brazos
Nada nuevo hay
bajo el sol
a otras crías sus manazas
No quiero dormir
porque puede que la muerte
me someta
en el instante en que
mis ojos cierre
Tantas otras madres
recién paridas
reventadas de tanto abrirse
a la existencia
mueren cazadas
por la noche
aun cuando en el sueño
todo aparentara
ser apacible
y la vida
eterna
Del libro URUX Una correspondencia (2018)
21 de diciembre, 2017
Querido:
He recibido tu azul impredecible
los fragmentos de Pittsburgh acordonados
Tu lluvia llega hasta Quito y moja el revés de la montaña
La montaña no sabe qué hacer con tanta agua
No sabe dónde meterse, por dónde empezar
Somos mansos en los puentes
y, en las calles, dos salvajes que apenas ven sus manos
Quizás por eso amamos tanto el apacible burgo
donde todo se confunde
y las mañanas no nos obligan
a ser otra cosa que silenciosos goznes imantados
Yo me ahogo en las ciudades, Ur
Te planteo un dilema
Necesito que me ayudes
que por favor me encuentres
¿Que una mujer te anuncie la muerte de un poeta
es o no la anticipación de un movimiento atarantado?
Otro perfil del mismo dilema
¿Por qué se le antoja al cuerpo otro cuerpo que no existe?
Hay un camino aprendido que es el que debería recorrer
pero me distrae la belleza del río
la destrucción, la ira
¿Qué somos, amigo mío, animales de agua o de aire?
Me escribes desde adentro
Casi puedo intuir las imágenes que duermen en los espejos de tu casa
predecir la desintegración de las gotas que caen del tumbado hasta tus pies descalzos
y ver cómo la paciencia, colmada de nosotros, aprende a destruir la piedra
Hoy te abrazo
y abrazo todo lo que amas
Tuya
Ux
Del libro Guayaquil (2019)
Agua
Si mi blusa tuviera un bolsillo
me aseguraría de que en él encontraras un papel con palabras
Una nota en la que te recordaría que mis manos son dos bultos pesados
que todo lo que tocan adquiere una vida tan efímera
que la muerte se precipita breve y que su color es azul
Mis manos son dos bultos pesados hinchados de agua
Atrofiados
Marfil
Que mis ojos no dejan de mirarte
porque mis pupilas tienen la forma
de la silueta de tu cuerpo
Que me muero de angustia
de calor
del trino de los pájaros cuando croan las ranas
Que me lanzo al agua por ti
abrazo cocodrilos
bailo con ellos antes de que anochezca
y no pueda ver bien sus patas reptiles que tanto me gustan
Que el aire tiene masa y peso
asimismo esta locura que incendia mi pecho tiene masa aunque no peso
por eso es tan dispersa
Que nadie me conoce mejor que tú
y que mi brújula se averió en la última lluvia
Que en Guayaquil llueve como si lloviera en dos ciudades al mismo tiempo
que no hay dispositivo que aguante
ni pintura en las paredes que aguante
solo mi amor que está hecho de balsa
Que sola recreo tu pelo
tus colores
la forma de tus medias cuando llegada la noche te desvistes
el olor del césped
el grito sostenido en la calle
aguaguaguaguaguaguaguagua
Te recordaría que misterio es no decir que se terminan los rollos en la cámara
Que te tomaría una foto cada día
y se las regalaría al sol para que duerma tranquilo junto a sus hijas
Llenaría tus álbumes
Te regalaría el sol para que nos devuelva las fotos
documentos inalienables
y le pediría que fuera siempre amable
que espere
Escribiría que eres una gota que cae sobre mi lengua
y la desintegra
y la multiplica en ramas
de árboles que no existen
especies de verde
que se recogen el vestido
para transitar por la vereda de la calor
Sudor
Siempre he querido ver cómo brota el sudor de tus poros
Me interesa menos su recorrido sobre tu piel
Éste es circunstancial
Aquello es de vida o muerte
He observado con detenimiento tus radiografías
Tus tomografías
Tus resonancias
He dado con la casi imperceptible desviación de tu columna
He concluido que tus órganos son pequeños
Durante días repetí el gesto de medir el tamaño del hematoma
Observé el cambio de color
Anoté el tiempo que toma pasar del verde al morado
Del morado al negro
Del negro al color de tu piel
Mirar hacia dentro como si no fueses tú
Me parece bastante ridículo
Tengo que familiarizarme con tus venas
Con tus nervios
Con las capas subcutáneas
He visto una y otra vez en video tus pólipos
Los he contado
Los reconozco
Son mis hermanos
He imaginado la intervención en tu útero
De aquello no quedan registros
Por eso me vuelvo un poco loca
Me desespero
Y en esas circunstancias prefiero no tener nada al alcance de las manos
He mirado tantas veces tu sangre
Conservé en el carro por más de un año
El sombrero y el chal que llevabas
El día del accidente de caballo
Verlos me recordaba que no soportaría tu muerte
Imagino el estado de tu cerebro entonces
Camino del hospital
Te pedía que no te durmieras
Conversaba contigo para mantenerte despierta
Hacías preguntas que me llenaban de terror
Preguntas simples que me llenaban de terror
He revisado tus medicinas
Memorizado sus componentes
Sus efectos secundarios
Te he visto sonrojarte efecto de la alegría y de la vergüenza
He apoyado mi cabeza en tu vientre
Reconozco todos los lenguajes de tu cuerpo
Soy una vidente
Puedes preguntarme cualquier cosa
Te responderé presto
Porque soy la lama que crece en los bordes de tus piernas
Del libro Caballo y arveja (inédito)
III
Mi reflejo en el paisaje lacustre que ahora nos mira
Roque
Mi Roque
Soy el ahogo en la caravana
Soy la grata astucia con la que miras tus huesos
Soy el descenso de una gota en un vaso
Soy tus lágrimas
Cuando el técnico en rayos x no da con tu venita delgada
Roque
Soy el insulto que le escupo al hombre que te lastima la pata
Lo quiero matar
he venido al fin a matarlo
Soy drama
Soy tu sueño de animal del océano pacífico
Soy tu garrapata muerta entre mis uñas azuladas
Soy el sonido que jamás escucho
Soy la onda
Roque
Soy la onda
Me expando en tu algarabía
De animal con el que los otros animales sueñan