Carpe Diem
CARPE DIEM
Muerde de una vez la manzana
que los cielos depositan en tu mano.
Agota este minuto inagotable.
Bébelo de una vez.
Contén esta hemorragia
antes que empalidezcan las mejillas
de una fenecida doncella.
Ya ves que la alondra va volando
y la saeta aún no sale despedida de tu verso.
(De Recidiva, Col. Amargord, Ed. Transatlántica, España, 2017)
PAREJA HUMANA
El hombre pierde la cabeza
El hombre en cuatro pies busca su testa
La mujer llora por el hombre
El hombre llora con su propia cabeza
bajo el brazo
La mujer y el decapitado se abrazan,
se palpan
La mujer acuna la cabeza en su regazo
La mujer amamanta la cabeza de su compañero
El cuerpo del acéfalo se contorsiona
La multitud vocifera delirante
La fusta del empresario zumba amenazante
La mujer y el decapitado hacen una venia
bajo potentes reflectores.
(De Desandar lo andado, ediciones Cordillera, Ottawa, Canadá, 1988)
Pasa el rebaño en fila funeraria
y atraviesa el pueblo con su fuente
Pasa el rebaño y pasa en seguimiento
de la oveja mayor, la más borrega
Pasa el rebaño en procesión sombría
y tras la huella los lobos cancerberos
van dejando un reguero de saliva
un rastro de sangre y poluciones
Pasa el rebaño y pasa por el puente
pasan los vagabundos y los trenes
pasa la loba amarga con sus tetas
pasa el rebaño y pasa lentamente
pasa la loba vieja, la más vieja
pasa la oveja negra a guarecerse
pasa la noche eterna, nunca aclara
pasa el rebaño y bala hasta perderse.
(De Lobos y Ovejas, Ediciones UDP, 2010)
LUNES NEGRO
Algo que está por encima de nosotros
nos levanta en el momento más alto
del amor.
Toda amenaza cesa,
todo pánico se esfuma,
los valores de la Bolsa se van al suelo,
nuestros cuerpos suben a la Gloria.
(De Cara de hereje, LOM, 2000)
EL ÁRBOL DEL AZUR
“…y he visto tantas veces lo que el hombre ha creído que veía”
Rimbaud
Has visto florecer el árbol del azur en medio de las furias
y el fragor de las trombas te ha derretido hasta las médulas.
Arrebatado por el éxtasis (no sabrías decir si vivo o muerto),
has contemplado lo innombrable
con la vista clavada allí donde la luz no osa penetrar.
Ah si consintierais en develar vuestro secreto,
criaturas sin sombra ni perfil.
Los abstractos te cubren con sus alas color palidez.
(De Recidiva, Col. Amargord, Ed. Transatlántica, España, 2017)