León Plascencia Ñol

Frente a un grabado de Katsushika Hokusai

 

 

 

 

Frente a un grabado de Katsushika Hokusai

(Tu definición mejor)

 

No iré a ningún lado hay rastros de espuma

una parvada de pelícanos uno se lanza

como dardo al fondo del mar en busca de comida

ah que tú escapes en el instante en el que ya

habías alcanzado tu definición mejor no

hay líneas formales trazos de Oriente nunca te amé

en Tokio la arena finísima se extiende una

oriental con rasgos de oriental un beso había

un grupo de japoneses frente al Rothko aquel perro

negro Trocadero una cama minúscula el asma

no iré a ningún lado no es una novela negra

una línea de coca para mi amigo tirado

en una cama blanca la caspa del diablo la voz

a ras de las olas los gritos las nubes como

fondo en la bahía no iré me dices basta

el salvavidas es un ancla no iré al fondo

de las cosas una muchedumbre casi desnuda

en mi playa cuánta algarabía aguas malas

aguas malas volveré entonces a caminar

por una calle tokiota adolescentes como

un río fragmentado frente a un cuadro de Rothko

alguien saca un cuchillo no es una novela negra

dispara dices no callo el sol es un reflejo

de estupor aquel perro negro persigue a un

grupo de pelícanos no iré camino por mi playa

ya no está aquí el caimán una boca estupor sí

demasiado ruido volveré por ti me perdí

en el metro Tokio es un reflejo un espejismo

está bien dices me pica la arena recuerdas

mi cuadro favorito es humo se está haciendo

humo hace frío es tarde podrías volver al túnel

dos peñas en mi playa la arena finísima

se extiende hace frío no entiendo voy a otro sitio

alguien juega en la playa volverás a Tokio nunca

te gustó la película de Kitano recuerdas

a la japonesa de piernas largas del Palais

Royal no vuelvo mi playa está destruida una grieta

hay muchedumbre estruendosa algo sucede con la visión

de fondo no es un relato policíaco es

la voz asmática de Lezama su girasol

callando una habitación Trocadero una cama

minúscula el asma el asma mi playa no volveré

Tokio es una postal la voz silente no hubo silencio

respiro con dificultad no iré a Tokio como

el mulo en el abismo la muchedumbre reflejos

de reflejos dijo aquella voz casi invisible

mientras el barco se aleja en el horizonte

La Habana diré algo más unas mulatas frente

al Rothko quisiera hablar con dios dice la mujer

de la hamaca lentamente balanceándose

aquí no hay nadie solo una muchedumbre un perro

blanco que persigue una pelota volveré dices

quiero beber algo una línea de coca para

mi amigo tirado en una cama blanca la caspa

del diablo la voz asmática de Lezama, ah que

tú escapes en el instante en el que ya habías

alcanzado tu definición mejor los pelícanos

aguas malas aguas malas no iré a Montego amé

 

los escaparates tokiotas una lenta procesión

la muchedumbre se sepulta ya no es mi playa

ni Tokio la película de Kitano tiene una

voz Lezama una forma esplendente iguanas deformes

agua casi pura escucho voces demasiadas

voces en la que fue mi playa ya no

hay nada la voz de Lezama ah que tú escapes

en el instante en el que ya habías alcanzado

tu definición mejor me voy.

 

 

 

 

Osaka

 

desde aquí

una flota de tramp steamers /

quietos como en una estampa que vi ayer /

no sé gran cosa

del embarque y desembarque /

un avión en el cielo / una estela al fondo / aquí

hay cosas / una lista de frases /

meto la mano a la mochila / camino media hora

de la estación portuaria al metro / nubes

bajo las escaleras / transbordo y el paisaje

se diluye en cientos de cosas / nadie sabe nada /

yo no sé nada/ insectos y cosas /

cientos de edificios / miles

de ojos entreabiertos / frases que no encuentro /

desde aquí busco llegar a algo distinto /

detrás de una máquina de boletos

todo es oscuro / la estación central es lo más cercano

a un planteamiento retórico / la idea

fluye y el tren se detiene / entro hacia las cosas.

 

 

 

 

Cold drink

Ayer escuché el latido breve de un animal no diré frases falsas dices no diré una palmera un valle de palmeras quietas no vuelvo el agua es un reflejo celeste lugares comunes lo oscuro un lugar es mucho más que lenguaje miro la planta enorme de romero el camino de grava las puntas solemnes del agave tienen una franja azul casi evidente todo es quietud tu brazo el abrazo dado un respiro no basta el lenguaje las flores evidencian un fracaso estructuras entre bordes voy a sumergirme despacio el mar tiene corrientes peligrosas y la parvada de pelícanos forma una línea paralela al horizonte[1] vuelvo a escribir para dejar un rastro el poema no tiene rojos tu abrazo de madrugada el pecho congestionado es mucho más que lenguaje espero una respuesta las olas son un azul distante se fractura la distancia ya no hay más quise escribirte una carta al Himalaya nada de nieve en estas líneas una franja de luz la distancia recuerdo frases de la película ya no estoy ya no voy tomaré un trago por ti dicen las voces quisiera poder describir el valle extenso de palmeras los verdes que observo desde la carretera una curva el auto detenido no sé por qué recuerdo a Baker una trompeta espera son rastros y humedad mis dedos están cubiertos de arena ya no está la frase se esconde aquel niño nadie avanza el pensamiento es una fractura no volveré no puedo quitarme la luz todo es una franja quizá debería fijarme en la línea amarilla de la carretera las señales pero el corazón engaña solo son cicatrices lo que queda de nosotros miro cuatro cabañas un estero una regadera hay más voces no necesito sobras de lenguaje estás aquí las nubes no esperan algo se abrió tienes una herida no sé de dónde vienen estas líneas no hay fracaso hay nieve pero algo es falso el lenguaje reconstruye la porción de mar que miro ahora voces en alemán una sequedad de rastrojo quisiera violentar los amarillos del paisaje ya no vuelvo toda construcción melancólica tiene un rasgo de impostura recuerdo esos versos de Celan Tú fuiste mi muerte sólo te tuve a ti cuando todo se me iba no es momento de reconvenir hay rastros fiebre casi un fracaso no puedo descifrar los límites es tan extraño describir este paisaje mezclo evidencias podrían hacer un sitio seguro no raspar el lenguaje el mar abierto hay corrientes no te recomendamos nadar bajo su propio riesgo dice la voz nada es así voy es demasiado está bien.

 

 

 

 

Virus Killer

 

En este lugar del mundo, silencioso

como un estornino muerto por la bala

que disparó un niño en North Carolina,

mis pies descansan desnudos

sobre unas telas húmedas que contienen

unas láminas delgadas de metal: lanzan

a intervalos regulares pequeñas descargas

eléctricas. Mi cuerpo quiere limpiarse,

arrojar lo malo que contiene, su singularidad.

Me gusta la palabra “singularidad”,

su deslavada imagen, su desprendimiento.

Mi cuerpo es un refugio derruido, pero antes

pudo ser cualquier cosa. Aquí en esta isla,

en este lugar del mundo, nado en la orilla

izquierda de mis muertos.

Hay una forma de ignorancia en el dolor.

No hay pérdidas. Intento mantenerme

en forma de muchas maneras.

Nos acercamos peligrosamente a la quietud

del fuego que arde a un lado del teléfono.

Mi cuerpo se limpia. Es una maquinaria

que susurra de manera saludable.

No hay conclusión en ello.

 

 

 

 

Mujer mirando un álbum de Utamaro

(Utamakura, circa 1788)

 

Para A A

 

No es lo que existe una sola idea este viento que entra de la calle de ambos lados

la nube me recuerda tal vez una postal de Bilbao o Madrás iba a decirlo Ella —vestido

ligero— mira las imágenes se mete la luz distinta por la ventana que da al norte mi rostro

en claroscuro no Caravaggio una luz difusa es el instinto para sobreponerse hay

demasiados perros en el edificio y Ella roza sus dedos imperceptiblemente el cuerpo

japonés desnudo las telas floridas el kimono los biombos una luz la flor de cerezo

es una flor delicada abre las piernas muestra sus muslos la brisa es nueva yo soy nuevo

como una grulla perdida en los arrozales me gusta Utamaro y tu olor hay arquitecturas

del lugar vine porque me dijeron que aquí las piernas abiertas de Ella es mundo tengo

miedo de mí dice después el silencio pero me gusta mirar la avenida desde este cuarto

piso aquí te espero ehon kiku no tsuyu leo despacio rocío en el crisantemo como si

todo estuviera dicho el cantinero murió de un ataque al corazón ya no volví más

a escuchar a Billie Holiday me largo hoy fue casi mi amigo me dio un disco

lo tengo guardado quise devolvérselo no me gustaba escuchar esa otra música

Ella es fiebre me gusta le diré monte nevado lengua muda no tengo hijos Ella

roza sus dedos imperceptiblemente el cuerpo japonés desnudo mi caligrafía es

un remedo antes de que viniera Ella la avenida se cubrió de blanco granizos

millones de granizos y una estela blanca pensé en otro país no hay premura no tengas

miedo le digo me abraza “el mundo es un texto de variadas significaciones y se pasa

de una a otra mediante un trabajo un trabajo en el que el cuerpo siempre participa

como cuando aprendemos el alfabeto de una lengua extranjera” dice Simone no

existe un lugar tan claro Ella desnuda lo recuerdo bien espero que dejen de ladrar

los perros ayer vi al vecino mordió los pezones de su amiga fue rápido un relámpago

son demasiados los ruidos del amor Utamaro dice su rostro tiene la dulzura

de una kisaeng voy a construir un jardín con los restos algo se escondió en su interior

algo distinto algo imposible lo encontré dice Ella la flor de cerezo yo estuve enfermo

hay caballos y paisaje mi katana es una grulla yo soy una grulla y Ella es mi extranjera

el viento ondea las cortinas nada tiene forma solo la mirada de Ella mientras entro

despacio es un tabachín lo que me recuerda Utamaro en su regazo Ella lanzó

un pedazo de carne come despacio no me gusta la cebolla pero puedes agregarle

mostaza el paisaje es como el vuelo de la grulla mi memoria sabe el tren iba veloz

y pasaban en silencio los arrozales me temo que Ella no sabe lo que es un ticús pero

aprieta mi cintura con sus manos entro despacio algo se perdió estoy aquí.

 

 

 

__________

Nota

(1) La indiferencia de la naturaleza, consuela (C M R).

 

 

León Plascencia Ñol (Ameca, Jalisco, México, 1968). Poeta, narrador, editor y artista visual. Dirige filodecaballos, editores y Nox Escuela de Escritura Creati ... LEER MÁS DEL AUTOR