Signo y otros textos
(Traducción al español de Marco Antonio Campos y Jean Portante)
MARIE[1]
Usted bailaba de muy niña
Y acaso bailará de abuela
Es la maclotte[2] que salta
Las campanas tañerán
Pero cuándo volverá usted María
Son silenciosas las máscaras
Y la música es tan lejana
Que parece venir del cielo
Quiero amarla a usted pero amarla apenas
Y mi dolor es delicioso
Las ovejas van en la nieve
Copos de lana y otros de plata
Soldados pasan ah si tuviera
Un corazón mío corazón cambiante
Cambiante y más más qué sé yo
Sé adónde irán tus cabellos
Copos como mar encrespado
Sé adónde irán tus cabellos
Y tus manos hojas de otoño
Que cubren nuestras confesiones
Yo andaba a orillas del Sena
Un libro antiguo bajo el brazo
El río es igual a mi pena
Transcurre pero no se agota
Cuando pues concluirá la semana
LA BLANCA NIEVE
Los ángeles los ángeles en el cielo
Uno viste de oficial
Uno viste de cocinero
Los otros cantan
Bello oficial color de cielo
La tierna primavera mucho después de Navidad
Te condecorará con bello sol
Con bello sol
Despluma la oca el cocinero
¡Ah! cae la nieve
Cae ah si yo tuviera
Mi bienamada entre mis brazos
ROSAMUNDA
Largo rato al pie de la escalinata de
La casa en que entró la dama
A quien seguí durante dos
largas horas en Amsterdam
Mis dedos arrojaron besos
Pero el canal estaba desierto
También el muelle y nadie vio
Cómo mis besos encontraron
A aquella a quien di mi vida
Un día por más de dos horas
La sobrenombré Rosamunda
Queriendo poder recordar
Su boca florida en Holanda
Con lentitud luego me fui
A buscar la Rosa del Mundo
SIGNO
Me encuentro sometido al Jefe del Signo del Otoño
Por tanto amo los frutos y aborrezco las flores
Lamento cada uno de los besos que doy
Como un nogal vareado dice al viento sus dolores
Mi eterno otoño mío oh mi estación mental
Las manos de las amantes de antaño cubren tu suelo
Una esposa me sigue es mi sombra fatal
Las palomas al ocaso emprenden último vuelo
OTOÑO ENFERMO
Otoño enfermo y adorado
Morirás cuando sople el huracán en las rosaledas
Cuando haya nevado
En los vergeles
Pobre otoño
Mueres blanco y rico
En nieve y frutos maduros
En el fondo del cielo
Los gavilanes planean
Sobre las nixas simplonas de cabellos verdes y enanas
Que nunca han amado
En apartados lindes
Bramaron los ciervos
Cuánto amo oh estación amo tus rumores
Los frutos que sin que se les corte
El viento y el bosque que lloran
Todas sus lágrimas en otoño hoja a hoja
Las hojas
pisadas
Un tren
Avanza
La vida
Transcurre
Notas
1.Este y los siguientes poemas de Apollinaire fueron traducidos en colaboración con Jean Portante.
2.Danza antigua de marineros (Bélgica)