Nace en Livorno en 1912 y muere en Roma en 1990. A los diez años se traslada con su familia a Génova, donde continúa sus estudios, especialmente de música. Lee a Ungaretti, a Sbarbaro y a Montale que admira porque es «uno de los poquísimos poetas italianos que de alguna manera ha influido sobre su percepción del mundo». En 1933 publica sus primeros poemas y el 8 de setiembre del mismo año lo llaman para hacer el servicio militar en la ciudad de Sanremo. Se dedica a la enseñanza y toma parte en las hostilidades en el frente occidental, pero después se reúne con los partisanos en Val Trebbia, donde se suma a la Resistencia. Al final del conflicto, retoma la enseñanza en Roma, colaborando en numerosos diarios y revistas. En 1983 recibe el Premio Montale. Traduce del francés a Proust, Apollinaire, Céline, Char, Genet, etc. Ha publicado, entre otros, los siguientes libros: Come un’allegoria (1936), Ballo a Fontanigorda (1938), Finzioni (1941), Cronistoria (1943), Stanze del funicolare (1952), Il passaggio d’Enea (1956), Il seme del piangere (1959), Congedo del viaggiatore cerimonioso & altre prosopopee (1965), Il «Terzo libro» ed altre cose (1968), Il muro della terra (1975), Poesie (antología, 1976), Erba francese (1979), L’ultimo borgo (1980), Il franco cacciatore (1982), Tutte le poesie (1983), Il Conte di Kevenhüller (1986), Poesie (1932-1986, 1989) y Tutte le poesie (1999). Sus obras en prosa incluyen: Giorni aperti (1942), Il gelo della mattina (1954) e Il labirinto (1984).
Giorgio Caproni dialoga con el blanco de la página, con el silencio; y su decir se vuelve cada vez más desnudo, seco, burlón, alternando la concisión del epigrama con leves acentos musicales. La ausencia de Dios, la nada de nuestra humana condición, la paradoja de una existencia donde presa y depredador se identifican, constituyen las líneas de una metafísica esencial que se realiza a través de pocas recurrentes figuras o imágenes (el cazador, el coche de línea, la taberna, la aldea) de un emblemático paisaje fuera de la historia que se cierne sobre el vacío, o que es él mismo el vacío.