Otro abismo
(Poemas seleccionados y traducidos del árabe al castellano por Khédija Gadhoum)
OBRA: Firas Sulaiman. اخيرا وصلوا لكن في توابيت / Finalmente llegaron, pero en ataúdes. Cairo:
General Egyptian Book Organization, 2019.
Otro abismo
Él no quiere que sus poemas
Crezcan e ingresen en la universidad
Quiere que estén a bordo de los barcos
Para que vuelvan a escribirlos los marineros embusteros
Los quiere
A pocos metros detrás del bosque
Donde amantes necios los malinterpreten
Los quiere en las tavernas
Como un soplo insignificante de aire
Que se quebrante entre dos brindis de copas
Los quiere asustados y confundidos
En el precipicio que separa los abismos de
La memoria y del olvido
En otro abismo los quiere
La guerra es un pretexto extraordinario
1
Tenían que haber venido
A pesar de todo el peligro que los acechaba
Eso fue lo que hicieron
Por fin llegaron
Pero en ataúdes
2
Dios mío, devuelva la bala a su origen
Ave extraviada
Devuelva
El ícono a su origen
Alma errante
35
Las fronteras de los países sobre el mapa
Del mundo
Se parecen a huellas de látigos
Sobre cuerpos presos
36
¡Oh mundo circo!
¿Quién salvará a su audiencia de esta fúnebre diversión?
¿Quién dejará libres a sus animales y sus payasos?
37
Acerca del dolor
Acerca de su fragancia
Acerca de noches que las balas del hombre blanco no ha logrado perforar
Acerca de un cielo hechizado por sueños ligeros
Acerca de los huesos de la historia que crujen en los estantes
de los que cuelgan alfombras tejidas por pueblos autóctonos
Acerca de Nuevo México
Acerca de una arcilla que alaba la belleza
Acerca de raíces extraídas de
sus lágrimas raíces que aún brillan en las alturas
Acerca de Samantha
Que no me deja olvidar lo de allí
Acerca de mí
Acerca
Del viento que está hilvanando lo que la geografía ha deshilachado
Campanas
Si crees que regresar
Es mejor que permanecer en el mismo lugar
Si tanto cuidas de aquello que has descuidado
Si sales al sol para asentir que tu sombra es un árbol
Que germina a tiempo
Si escribes sin motivo de dolor o de nostalgia
Si te sientes inevitablemente inclinado a borrar aquello que no has escrito
Si piensas que al cabo de un tiempo no estarás dentro de tu vida y
De ti no habrá nadie para percatarse
Para anunciar
Este es un hombre ya vacío del miedo al miedo
Por lo tanto ha muerto igual a una teoría equivocada
Si se te ocurre valorar la idea de que nunca has venido
Y que te has ido lejos…muy lejos
Para no cosechar nada
Si… y si… y si…siguen tocando las campanas
Eso será lo máximo que puedan hacer
Un hombre vuela
Las cosas ya no son más que un murmullo excepto palabras
semejantes a unas ancianas en movimiento lento
El mundo ya no es más que una probabilidad inexplicable
Solitario tu cuerpo fragancia de una época que huelo y lloro
El terror que describo. El atardecer que cautivo en tu cocina
No entiendo el huevo de madera con su boca abierta en el alféizar de la ventana
No entiendo mis lágrimas en tu hombro no entiendo las señales del miedo encima de tu pecho izquierdo
No entiendo los mapas de los arquitectos del dolor de una ciudad que ha dejado de existir
No entiendo Manhattan por la mañana
No es una imagen que le hace falta al poema
Tus pies son cortezas del cielo
Un cuerpo real
Estoy volando
Sólo un temblor en el ojo para inmortalizarme en el aroma de los caballos y el pasto seco
y los dioses que tiemblan
El aroma que emana de tu dormitorio
Un solo temblor en el ojo
Y toco el fondo que flota sobre tu cama sin pena y con muchas lágrimas.
Tu cuerpo inmenso en el tiempo
Una pandilla de niños gitanos con camisas de flores se arroja en mis días vacíos
Tu cuerpo un súbito este
Un extravío.
El terror que describo
Beso tu comida
No me la como
Beso tu cuerpo
No me acuesto con él
Imagino mi vida en tu casa
¡No sé quién soy!
Lejano sur
Vendrán de alguna parte
Manchados con aquello que no han experimentado
Y entre sus manos relumbrarán elementos innecesarios
De largo pasarán organismos como si un remordimiento apócrifo los hubiera creado
Sus fondos como lentes de cámaras lucirán
Profundos…
Cuerpos extinguidos
Con olor a armas defectuosas y algún sur lejano
En sus harapos el tiempo remendado y medio borrado
Aquellos que nos saludan como si hubieran llegado
Aquellos que transitan son nuestros hermanos
A quienes con cautela tenemos que saber cómo amarlos
Cómo medimos la distancia entre nosotros y ellos
Antes de que estalle la guerra