Costel Stancu

Una araña teje tu muslo en un sueño

 

 

 

(Traducción al español de George Nina Elian)

 

 

 

 

yo era joven en pleno invierno había salido de casa
desnudo ¡vergüenza, vergüenza! gritaban las ancianas del pueblo
iconos que se daban vuelta solos hacia la pared
algunas todavía echaban un vistazo,
recordando su juventud y al cristo crucificado
casi desnudo nevaba, nevaba o dos amantes
tenían una pelea de almohadas no lo sé ni siquiera ahora
una vez que llegaba al río helado rápidamente hacía
una grieta y me arrojaba a ella
la muerte estaba dentro de mí todo el tiempo
pero nunca me encontraba

 

 

*   *   *

 

De vez en cuando
Dios reúne a sus locos
y les pregunta:

¿Quiénes sois vosotros?

Felices,
le señalan
con el dedo.

 

 

*   *   *

 

 

Puedes comenzar tu viaje hoy. Tu cara
llenará el exterior del espejo.
Llévate también tu alma, candado sobre el que ya ha llovido bastante.
¡Libérate, pierde la razón! Quien la
encuentra es siempre Dios.
¡Huye! No tienes nada que esperar aquí, donde sólo
la muerte te es más fiel que la sombra.
¡Córtate el ombligo, vacía tus bolsillos
de piedras! Encontrarás otras en el camino.
Eres tu propia llave, la única.
¡Vete! Y no te sorprendas de que siempre
descubrirás bajo tu lengua, en pequeños ataúdes
de chocolate, el sabor amargo de
las mujeres que alguna vez amaste.

 

 

*   *   *

 

 

cuando mueres
pasas siempre por el corazón
así como una habitación
sólo puede vaciarse
de sí misma
por el ojo de la cerradura
aunque todas las ventanas
estén abiertas de par en par

 

 

*   *   *

 

 

Sólo cuando duda de sí mismo
el hombre se vuelve completo. Hasta entonces,
deambula aturdido por el mundo, preguntándose
por qué Dios pone linternas
en manos de los ciegos, mientras finge
no ver cuando el payaso deja caer una
gota de veneno en la copa de vino del rey.
¡Qué extraña es la vida!
Ayer conocí a un payaso desterrado de la Corte.
Me habló de la tristeza.
Bebimos del mismo vaso.

 

 

*   *   *

 

 

Cuando era niño tenía un amigo imaginario.
Lo mantenía escondido en el sótano. Le traía
en secreto manzanas, nueces… Un día, bajando
a tomar una jarra de vino, mi padre me sorprendió allí.
¿Qué estás haciendo? me preguntó. Estoy hablando con
mi amigo imaginario, respondí.
Al día siguiente me llevó al médico.
No hay nada anormal, le dijo.
Cuando yo tenía su edad, yo también tenía
un amigo así. ¡Vamos, este hombre está loco!,
decidió papá, molesto. De camino a casa,
paramos en una librería y me compró
un libro de cuentos. Aquí tienes tantos amigos
imaginarios como quieras, me aseguró.
Le creí. Siguieron más y más libros.
El tiempo ha pasado. Hoy me siento y observo,
sonriendo, cómo mi hijo se maravilla de que
en cada libro que abre
encuentra cáscaras de manzana y restos de nueces.

 

 

*   *   *

 

 

costel stancu entra silenciosamente en la ciudad, convencido de que el hombre
es algo más que un descubrimiento de dios
le gustaría olvidarlo todo pero su memoria es como
un hoyo que se profundiza a medida que intentas salir de él
y por eso no puede ser feliz en vano lo amáis lo odiáis
vosotros cien mujeres lapidadas
buscáis en vano a sus pies el perdón él sigue adelante
y encuentra frente al fotógrafo al mismo hombre sin
un rostro específico (más tarde
recordará sus siniestros movimientos)
él se diferencia de los demás precisamente porque no puede imitarlos
sabe que no hay fin y que hay que simularlo
hay que encontrar un juego (si se le puede llamar juego) donde
la muerte es el tramposo que atrapas
pero cada vez te muestra las manos vacías.

 

 

*   *   *

 

 

la mañana y su hipnosis habitual me duermo
tú me tiras piedras al oído para despertarme
nos pintamos la cara de un nuevo color
nos amamos como si fuéramos otros
por encima de la valla, el niño dominic les grita a los vecinos
— ¡ellos no hacen el amor, sino arreglan discretamente el interior de un huevo
querida, sobre la alfombra una luz descongela el cerebro del perro
un deleite enfermizo en el alma, en el agua que mece los ojos
y los marea hasta tarde
cuando los grandes barcos dormirán en el exilio
con un imán el niño mueve los pájaros en el cielo
y llora si alguno de ellos cae al río de vez en cuando

 

 

*   *   *

 

 

muerte: una danza cerebral. un grillo
en el silencioso osario de la memoria.
presiento
el in-fi-ni-to
este ojo que se hace más grande a medida que me alejo de él
me siento como una piedra atada al cuello del feto
y cada vez más largo es el tiempo
medido en el sentido opuesto
de su flujo
¿recuerdas cómo las dos caras de la máscara
intentaron venderte entre sí?
(pregunta dominic, feliz de ver la luna)

¿el arte? una flor en la ventana del suicida

 

 

*   *   *

 

 

tu ojo se abrió, Señor, ¿qué puedo mostrarle
cuando todo se me vaya sobre el agua?
plumas de ganso en la noche: las almas de los hombres,
colgadas de un hilo alrededor de tu cuello.

un silencio de comienzos. el tiempo se endurece
como una orquesta atenta a las manos del que se ahoga;
sólo yo escucho en mi sueño el murmullo del agua
sobre el icono al que rezo.

el sol sale del mar; el círculo se cierra:
una serpiente que muerde, sigilosamente, su propia cola.
no te muestras, pero cuando giro las piedras,
desde la cara oculta de cada una un ángel me habla.

nosotros dos en el cielo, de repente, enormes:
hombre y santo corriendo el uno hacia el otro
y cerrándose perfectamente, como la axila
del bajado de la cruz.

 

 

*   *   *

 

 

una araña teje tu muslo en un sueño
¿qué pensamiento escondes de tal manera que me da sed?
a medianoche mi madre me grita
que no beba el agua de la muerte

tu fragancia comienza su danza bárbara sobre las mesas
¿oyes?
en el reloj el par se deshace
tic-tac tic-tac tic-tac

el tiempo se detiene
algo siempre queda poco claro:
siete días y sólo seis caras del dado

 

 

*   *   *

 

 

30.

Arrojo tierra sobre el que escribe.
Tengo miedo:
¡tírame una cuerda desde el cielo!
El pájaro cuyo canto escucho ahora
es el cenicero
del pájaro de antaño.
Las piedras en el agua y las estrellas en el cielo
se mueven según la misma ley
entre las profundidades y la superficie,
de modo que ya no puedo entender.
Y, Señor, hacia ti
extiendo mis manos:
los pecados se han multiplicado
más rápido que los panes.

 

 

*   *   *

 

 

Por mucho que sacuda
el árbol en medio del jardín,
aún quedará entre sus ramas
un nido desconocido para nadie:
el secreto de mi corazón.
Así como en toda casa abandonada susurra un manantial
custodiado por ángeles. De lo contrario, ¿quién limpiaría
la ventana con sus alas por la mañana
hasta vislumbrar el mundo del más allá?
Me haré pasar por muerto
para poder sentir dentro de mí vuestras vidas.
Huevos de cuco extranjeros.

 

 

*   *   *

 

 

Una cacería al final de la cual el anillo de la pata de pájaro
brilla en mi dedo. Firida donde Ana de Manole*
da a luz a un niño con alas y se lo dedica a Dios.
Un giro de la mirada, como la de los ciegos, de la nada
al todo. El viento que esparce por el mundo, para
el recuerdo, la sal de la mujer de Lot.
El paso del alambrista cuando los tambores
– tantarán – anuncian majestuosamente su caída.
Una palabra sobre las arenas movedizas del papel
como miel en las patas de un oso.
El silencio que se cuela en el alma, el tiempo inexacto
entre las estrellas. Un agua que fluye
sobre la dura piedra de mi corazón.

* Personaje de la Balada del Maestro Manole o Monasterio de Argeș, la esposa del maestro constructor Manole, quien, para evitar que el edificio se derrumbe, la emparedó viva.

 

 

*   *   *

 

 

¡Ámala! ¿No ves que eres demasiado débil
para tomarla cautiva? ¿Que tu corazón
urge a correr, hasta sangrar, un caballo
que la mente no conoce?
¡Ámala humildemente! Cuando ella
toma tu mano, hasta el último esclavo es más grande
que tú. ¿No lo sientes? ¡Ámala!
Para que sus ojos no alcancen
dos medias lunas oscuras, sus cejas —
tejados arrastrados por el viento.
Y las letras — orillas derrumbadas
en el agua de una palabra. ¡Ámala
para que su ventana no quede sola,
y el espejo no le mienta
que ella es la más bella! ¡Ámala!
¡La muerte está cerca
y no deja rastros!

 

Costel Stancu El poeta  nació el 2 de mayo de 1970 en la aldea de Vânju Mare (condado de Mehedinți). Debutó con la poesía en 1988, en la revista "S ... LEER MÁS DEL AUTOR