Mi creación surge de un lugar que atraviesa
presente y memoria

 por Floriano Martins

FM | ¿De dónde sacas tu creación?

AV | Mi creación surge de un lugar que atraviesa presente y memoria, ese espacio donde se entrelazan los afectos del pasado y los del momento. Traigo a las personas que se han acercado, hago imágenes que solo puedo escuchar y trato de cristalizarlas en el verbo de la mejor manera que puedo, con las herramientas que tengo, con el primer ritmo que se me aparece en el plano mental. Mi creación proviene de heridas que aún no se han curado, con la esperanza de que puedan perpetuar la voluntad de curar, y viajar a través de objetos, visualizar lugares y personas, intentar acceder al suelo en lugar de perderse en el infinito. Proviene de un lugar donde la creación pretende ser música antes que palabra, voluntad antes que materia, sueño antes que poesía.

FM | Poesía, amor, libertad: la tríada esencial del surrealismo. ¿Cómo ella es parte de tu vida y cómo se integra con tu creación?

AV | Analizando cada parte de este tríptico, inicialmente, la poesía me resulta fundamental para replantear mi existencia. Solo a través de sus lentes puedo generar y desarrollar ideas, percepciones, visiones que me hagan crear, y lo tengo como mi razón de ser y estar en el mundo, mi principal elemento de vida. El amor es esencial para mí porque hace que todo esto palpite con una intensidad y energía que no está presente en ningún otro sentimiento. Representa la voluntad, el ímpetu, la fuerza creativa. La libertad es un medio por el cual la poesía y el amor pueden ser genuinos, es una hoja de papel en blanco y la pluma vuela de la mesa a las nubes, es un pájaro mártir.

FM | Dentro y fuera del país, entre vivos y muertos, independientemente incluso de la poesía, no solo mencionando los nombres, sino comentando los motivos, ¿podrías mencionar algunas de tus afinidades en la creación artística?

AV | Mis principales afinidades son Roberto Piva, Hilda Hilst, Marceli Becker, Adélia Prado, Fiori Ferrari y Cecília Meireles, por ser autores que siempre mueven engranajes ocultos, abandonados en mi mente. Me despiertan a lo nuevo con cada lectura. Sorprenden, acechan. Se abren infinitas ventanas de posibilidades.

FM | He notado que, especialmente en los poetas nacidos después de 1980, hay un renacimiento del lirismo brasileño, que está tanto en la densidad de la escritura, en la definición de una voz propia, como en el sentido de una solidaridad explícita, sin que esto refleje la existencia de un movimiento. ¿Qué observa al respecto?

AV | También puedo ver este resurgimiento en la poesía posterior a 1980. La poesía ha estado tratando de profundizar cada vez más en el alma y cristalizar. El deseo de lo eterno está latente. Los poetas han mantenido interesantes redes entre ellos, aunque todavía están muy dispersos. Aún quedan muchos consejos para conectar, pero estamos caminando por un camino bonito y cariñoso.

Poemas de Amanda Vital

zumbido

esta es mi parte en este latifundio:
una copa de vino para darme coraje
una boca precisa para ofrecer la mía
una conversa de vieja para recordarme
un pequeño estuche a sacudir los cambios
una mano para pedir rodajas de mandarina
un problema a resolver en los silencios
un carbón que no duerme cuando borro
una flor marchita metida en el cabello
un pecho todavía sensible a la ternura
una noche para caer ante mis ojos
un poema al día o cuanto sea suficiente

resurrección

decimos la palabra dios de la misma manera
con una mezcla de culpa, desdén y miedo
no sé si es por el acento: un discurso caipira
de campesina rebelde que no suelta la fe
mínima que está vinculada a objetos pequeños
un bibelô de nuestra señora de la concepción
el rosario de nácar heredado de la abuela
¿será que ella también dijo la palabra dios
con una mezcla de culpa, desdén y miedo?
este lenguaje viene de nuestras abuelas
pesado de arrastrar azadas a regañadientes
de llevar sacos de yute por las jorobas
de vivir el castigo de no ir nunca a misa?
La lengua también puede vengar a los abuelos
nacer una vez más ligeramente cosmopolita
comer la culpa liberarse del desdén: ¿no
tener más miedo de decir la palabra dios?

armadura

cuando niña presionaba sus dedos en el dobladillo de su falda
de algodón en un rincón vía lindas compañeras corriendo
sus cuerpos de diente de león sus ligerezas sin esfuerzo
por el patio sabían trepar árboles y saltar paredes
y sabían decir las palabras exactas con que derrumbar
desde allá arriba las palabras saltaron sobre mis hombros

cuando mujer aprieto mis dedos debajo de la chaqueta
y creo la fuerza para enfrentar la belleza hoy dejo la esquina
con los hombros tensos para no caerme y creo mis patios
por encima de los árboles y fuera de los muros también soy ligereza
Recogí los nidos caídos del suelo las semillas expuestas
y dentro de mí un pájaro ha vivido veinte y pocos años