Alberto Blanco. Espacio vivo

 

Presentamos tres textos del reconocido poeta y traductor mexicano.

 

 

 

Alberto Blanco

 

 

Un buen poema

 

A Wislawa Szymborska

 

Un buen poema
debe tener la fuerza suficiente
para aguantar de todo:

Ediciones caseras,
malas traducciones,
errores de ortografía, erratas,
machetazos a caballo de espadas,
cartas de amor,
bibliotecas olvidadas,
programas de televisión,
películas de arte,
películas de las otras,
ironías de la vida,
correcciones de última hora,
internet,
manifiestos,
revoluciones,
malos gobiernos,
conversaciones de café,
confesiones de media noche,
días con sol, días nublados,
buenas críticas,
malas críticas,
cero críticas.
Un buen poema
debe ser lo suficientemente fuerte
como para soportar
interpretaciones abusivas,
cursos escolares, tesis,
musicalizaciones,
antologías,
presentaciones,
lecturas colectivas,
homenajes, plagios,
epígrafes, dedicatorias,
obras completas.

 

 

 

Un sueño del lenguaje

Nada de lo que digo
es sólo un sueño
del lenguaje.

También existe
el que sueña
este lenguaje.

Y, por si fuera poco,
el que lo escucha
y lo comprende.

Nada de lo que digo
es sólo un sueño
del lenguaje.

Porque aquí estás tú.

 

 

 

Espacio vivo

Aquí vivo.
Entre estas cuatro orillas vivo.
Éste es mi espacio, mi refugio,
mi medio, mi herramienta.

¿A dónde he de ir ahora?
¿Acaso hay algo más
que esta página en blanco
de mi vida?

Aquí te ves
y aquí te veo,
una vez más, lector.
Aquí se da el encuentro.

¿Hay algo más para ti
—por el momento—
que esta página
que el destino nos ofrece?

Entre estas cuatro esquinas
hemos de confirmar lo que somos:
¡hilos de luz en la neblina!