Adonis

Principio del cuerpo, final del mar

 

 

Traducción al español de Jaafar Al aluni y Antonio Martínez Castro
Revisión de Clara Janés

 

 

 

1

 

Sale la rosa del semillero

a su encuentro.

El sol de otoño la espera

desnudo con un hilo de nube en la cintura.

 

Así nace el amor

en la aldea de donde vengo.

 

 

 

2

 

–De tu boca de luz

ningún color

del horizonte es digno.

–Tu boca es luz y sombra

en una sola flor.

 

 

 

3

 

Por ella,

no quiero estar sólo por estar.

 

Me ilumino

y me encadeno

a sus brazos.

 

Para nosotros canto, le canto.

Por ella,

cuerpo luminoso que me aprisionas, ¡enséñame a cantar!

 

 

 

4

 

Me levanté y pregunté al alba por ti: ¿se ha despertado ya?

 

Vi tu rostro en torno a la casa, dibujado

en cada rama. Di la espalda al alba

y pregunté al rocío de las ramas:

«¿Ha llegado

o es un sueño?»

Pregunté al sol si había leído tus pasos

si habías acariciado la puerta,

cómo se iban

a tu lado las flores de la casa y los árboles.

A punto estuve de partirme en dos:

mi sangre está allí y aquí está mi cuerpo– una hoja

que la llama arrastra en la sequedad del mundo.

 

 

 

5

 

Era verano cuando dijiste

«la mariposa» y te giraste hacia mí

sin acabar la frase. Andábamos,

el camino tiraba de las ventanas y

la casa salió del barro

a recorrer los campos cuyos secretos

se nos revelaban. Susurramos:

«Éste es un mensaje del misterioso cielo del que descendió Nefertiti».

Y exclamamos: «¡Cuánto nos gustaba hablar de Sherezade en las

tardes de verano!»

(Sherezade

la que sólo canta a las heridas que se le acumulan en el pecho

para disfrutar así de los placeres del azar).

Era verano cuando nos separamos.

 

 

 

6

 

Imagino que mi amor

aspira del pulmón de las cosas

y exhala, rosa y polvo,

la poesía.

 

Conversa con todo

y transmite su estado al universo

como lo hacen el viento y el sol

cuando abren el pecho de la naturaleza

y vierten la tinta de los días

en el libro de la tierra.

 

 

 

7

 

Silenciosa es la noche.

Una flor se inclina,

algo similar a un balbuceo

sin sobresalto ni excitación.

 

La noche respira en los pulmones

y las ventanas bajan las pestañas.

 

–¿Lees?

–¡Deja el té!

Una luz pasa de un cuerpo a otro

y cambia el rostro del lugar.

 

 

 

 

-Adonis
Principio del cuerpo, final del mar
Traducción de Jaafar Al aluni y Antonio Martínez Castro
Revisión de Clara Janés
Ediciones Vaso Roto, 2020

 

Principio del cuerpo, final del mar

 

Adonis Alí Ahmad Saïd Esber, nacido en Qasabin, Siria, en 1930, adoptó el nombre de Adonis como poeta. Estudió letras en la Universidad de Dama ... LEER MÁS DEL AUTOR