Javier Alvarado. Hay una aldea hecha con los poemas de Ledo Ivo

Compartimos un texto clave del reconocido poeta panameño.

 

 

 

 

Javier Alvarado

 

HAY UNA ALDEA HECHA CON LOS POEMAS DE LEDO IVO

 

“Lédo Ivo es un hombre viejo que vive en Brasil y sale en las antologías con cara de loco”.
Juan Carlos Mestre

 

Ya los cangrejos caminan sobre Ledo Ivo

Sobre las casas y los sueños

O los promontorios en la tierra de Maceió,

Ya se volvió mar bajo los barcos

Y desató sus palabras como gaviotas en el muelle

Silbando esta vez           ese acorde funéreo            para las carnes de Hermengarda

Para esa ebriedad que traspasa las boquitas de los murciélagos y las colillas de cigarro

En la caverna más oscura donde tintinean las almas como oseznos,

Donde se mancha la oscuridad con esa iridiscencia de tus constelaciones

Increpando la resurrección del gallo,

La leche estelar de las espuelas

Y el plumaje irredento corajeando entre los patios y entre las casas marinas

Donde los niños se sientan en el lomo del caracol

Y las niñas fijan su belleza a las estrías teologales de las conchas.

 

Esta es tu aldea donde un niño llamado Ledo empezó a escribir sus poemas en la arena

En los pétalos de la caña y en los trapiches donde el pueblo suda

El jugo inmemorial de la caña

El jugo equinoccial de la caña

El jugo demencial de la caña

El jugo sexual de la caña

Junto al aroma infinito del cacao, junto a las flores del cacao, junto a las semillas del cacao,

Donde

Clareas esta vez sobre las piedras, sobre el testamento de una negra bailando samba

Silba que te silba el vals funéreo

Para las carnes de Hermengarda

Y eres tú caminando mulatamente sobre las nucas vacilantes de los cangrejos

Sobre una iracunda hoguera de agua, sobre los pilotes azarados

Por la espuma reinante,

Abriéndose tu palabra como un lecho de hojas,

Como una almohada de árboles sobre esos sueños gualdos

Que van a la memoria del camino y terminan en los pies

De los infantes y se ponen a correr

Y rechinan como abejas o mariposas al cuidado de la nieve profunda,

De la nieve inventada y del sol que ordeña los milagros de las cabras

Donde hay brujas y mujeres explicando la redondez de la tierra

Con rituales dibujados en las esferas monacales del coco

Y muchachas extrayéndose del corazón cardúmenes de peces.

 

Ya los cangrejos caminan sobre Ledo Ivo en la tierra de Maceió.

Allá en el Brasil hay una aldea

Donde aprendió a escribir poesía

Un niño antologado con cara de loco,

Separando las patrias de las lenguas,

Emigrante e inmigrante de la lengua portuguesa

Haciéndola tierra,

Haciéndola jugo de caña

Haciéndola cacao,

Haciéndola cangrejo sobre las playas de Maceió.

 

Allá en Brasil hay una aldea hecha de los poemas de Ledo Ivo.