
Es numerosa la crítica sobre el Creacionismo literario, como son cuantiosos los estudios que han tratado de dilucidar las controversias que rodearon a este movimiento. De los primeros, la mayoría se instala en análisis que dejan entre renglones la obra romántico-modernista de Vicente Huidobro, que va desde 1911 a 1914, y optan por aproximarse al tema a partir de El espejo de agua de 1916. Otros se centran en creaciones posteriores más conocidas, como Temblor de cielo o Altazor. De los segundos, muchos, simplemente abordan la polémica en base a suposiciones, produciendo análisis personalizados que no ahondan en los incidentes ni realizan un examen comparativo de los dos individuos que terciaron en las polémicas