Musa recostada
Rugendas, Retrato de una dama brasileña
Para Luchi Villas Bôas
Este retrato de ella es sobre el talle
de la embaúba, esbelto, en las colinas
de estas sierras, de donde su mirada
se desarraiga, oscura, y vuelve plata.
Es y no es de aquí, la dama atlántica
que debo retratar, con su cabello
de hebrea, que se riza como ideas
que en la cabeza germinaron y huyen
ardientes bajo la arborización
urbana. Pero adentro, lo esencial
se oculta. ¿Lo no visto, cómo pinto?
Tomo también mi propia semejanza,
Sólo para ella. Y ya trazo la hoja,
nunca tan blanca, nunca más en blanco.
Inédito.
Traducción del autor.
Nau: Nave
Es decir: ahora.
Usase para
descubrimientos.
De Nada a ver com a Lua (1996).
Traducción de Gonzalo Espino Relucé
Caballero
En el lado oscuro mora
el esqueleto de San Jorge
con su caballo manco
con su báculo blanco
sin espada
mira perdido en la
nada
soledad/ dragón
en el lado izquierdo late
la falta
el santo.
De Nada a ver com a Lua (1996).
Traducción de Gonzalo Espino Relucé.
Bus
Desperté en otra ciudad,
abro los ojos en la falta de promesa.
Amanecí en la misma cara,
vago, vario, viario.
Olvido el nombre que me recuerda
en el corazón ilegible.
Bajo del ómnibus con el día,
me voy a lavar el rostro en la duda.
Desperté sin llegar, llegué.
De O ar das cidades (2000).
Traducción de Gonzalo Espino Relucé.
Candelabro
Sobre la masacre en la Iglesia de la Candelaria
(Río de Janeiro, 23 de julho de 1993)
La purificación de la Virgen
a bala.
En la zona donde la ciudad hace
finanzas.
La Candelaria tañe el bronce
del signo.
Al frente, la calzada lavada
con sangre.
La sangre que se niega a ser
menstrual.
Matanza de crías nacidas
no-nadas.
Ahora que están muertas son
visibles.
La puta que parió que nos
perdone.
De O ar das cidades (2ª ed, 2007).
Traducción de Gonzalo Espino Relucé.
Antes
Carretera BR-040, diciembre de 2008
Es la conciencia-neblina
impregnada en el paisaje.
Como una letra abstrusa
que volviera a la palabra.
Ómnibus, sustracción, sub-
til, susceptibilidades.
Como un rebaño letrado
que paciera trasparencia.
Flujo-nubes de oclusivas
en obstáculo total
Pluviosa consonancia,
todo un río evaporado.
Que fluye cuanto flotara
o cava su lecho en el aire.
Curso que no se pronuncia,
mientras no se precipita.
Que no obstruye la caminata
radial de los transeúntes.
Antes enfada la duración
que, no obstante, se infiltra.
Lana de consonantes mudas,
niebla, solución de agujas.
De Píer (2012).
Traducción de Gonzalo Espino Relucé.
Musa recostada
Hacia el sueño se va, envuelta
en sus cuatrocientos hilos
además del edredón.
Embalsamada en sí misma,
espera el sueño, su entrega,
está acunada en la balsa
que va al reino de los muertos
de tedio, que no se han muerto,
y anhelan por una pausa
de las citas y los ritos
de encarnación y pasión.
Se dimite de la noche
y del deseo, ya viste
la máscara de dormir
que se apaga, está cerrada,
está ya desconectada.
No la invoque hasta las diez
de la mañana siguiente
ningún poeta o servidor
del insomnio, nadie llame
a las puertas de su carne
dormida, por desvarío
o más lúcida lucidez,
por un beso, una palabra
o su endoso, o su gozo.
De Píer (2012).
Traducción de Gonzalo Espino Relucé.
Nuestro Angelus
Sobre el asesinato bajo tortura de Stuart Angel Jones
(Río de Janeiro, 14 de mayo de 1971)
Mirada desorbitada. Sucia de tierra. Sucia de haber
mirado demasiado.
Sopla ahí una tempestad. No viene desde el paraíso.
Quizás vaya hacia allá.
Aunque no sea de hecho una tempestad.
Chillido. Bate. Garrote. Bota. Sótano. Péndulo.
El trópico es el pau-de-arara en que han colgado el ángel de la historia
de Brasil, para ser torturado.
Aura destrozada, sin chance de alegoría.
Alas desplegadas porque fueron estiradas, alas repujadas.
Boca abierta porque fue atada al tubo de escape de un jeep de la Fuerza Aérea
en 1971, el cual aceleró y lo arrastró por la boca hacia el fin y después.
Sin que pudiera mirar las ruinas detrás.
Dibujo de manchas de sangre en el patio de cemento,
proyecto de futuras grietas bajo el trópico.
Revelación / ocultamiento / desvío y vuelta
en abismo.
Ningún otro ángel ha dejado un cadáver.
Para que se lo traguen. Y nunca ser encontrado.
Sin que jamás se pueda terminar la búsqueda.
De Píer (2012).
Traducción del autor.