Si hubiera sabido
(Traducción al español de Emilio Coco)
(Cada cosa tiene su sueño)
Cada cosa tiene su sueño
y su manera de ofrecerse.
Cuando está verde
la madera perfuma.
Cuando está seca se rompe
y luego arde.
(A cada oráculo)
A cada oráculo un tahúr
A cada roca su osario
de adivinos inconscientes.
No nos he dado saber
cuál es el tiempo, ni el modo.
Pero el dolor tiene su vado.
Descienda el fuego sobre Jano
y sobre Adán
el torpor.
(Tarde se ha doblado)
Tarde se ha doblado
la glicinia sobre el parral.
O demasiado de prisa
el perfume
nos ha encontrado.
Como el silencio que precede el sonido
y vuelve superfluo el chantaje.
CLAIRIÈRE
Al final
es quizá el destino de cada hombre
aclararse
como un bosque
cuando permanece a la vista
una cosa sola
contra el blando horizonte
y ofrecer justo aquélla
al mundo y al cielo
como se ofrece a un padre
la frente.
ALETHEIA
Tiene ojos de pájaro nocturno.
En las garras
un silbido musgoso.
Desmenuza la distancia del cielo
para servírtela en bandeja
y desmiente al listo cuclillo.
Pero cada movimiento del corazón
celoso
lo siente.
Ten cuidado.
No soples sobre el nido.
Que no se levante en forma de briznas
el recuerdo
en el viento más alto
y vuelva a caer
no resuelto distinto
sobre el contorno verdadero
donde está encerrada la presa:
mi rostro
en el tiempo.
MITAD
Eres por mitad
mi pasaje obligado
desde las cimas cegadas por la ventisca
hasta los desnudos epicentros del aliento
donde más verdadera
crece la vida
en las entrañas del riesgo.
Y por mitad
estoy fuera de toda ruta
un paso escarpado
no expugnado:
en la total ausencia de pruebas
eres mi dulce crimen
nunca cometido.
(Soy)
Soy
aquel fondo de aire
que más que otros manifiesta
la lluvia
la zona suspendida
donde más claro
se esboza
el deseo.
Soy
aquella yo
que me revela.
Pero es siempre
un rostro de ausencia.
(He visto un ángulo)
He visto un ángulo invariado.
Luego me he percatado con los años
que de los tres lados
uno se ha reducido.
Entre los otros dos –el blanco y el negro–
es muy breve ahora la distancia.
El espacio llano circunscrito
se ha reducido.
A veces incluso
en el encabalgamiento lo que queda
es una línea un sedal
un segmento ni blanco ni negro
que se vuelve más gastado
casi un punto
que quema
carente de atributos
que en sí no tiene ninguna superficie
pero que deja por doquier
un estar ilimitado.
(Si hubiera sabido)
Si hubiera sabido
cuán verdadera es la muerte
habría silenciado
el asalto a mis sienes
utilizado otras armas
habría desvestido en mí
al enemigo hasta su última camiseta.
Si hubiera entendido
que la muerte no devuelve lo que se lleva
en la batalla
habría sido el golpe
no este sonido blanco
incesante torcido
de corno
en la retaguardia.