Pájaros de papel
La amante del desaparecido
El alma de mi mano va en busca de tu cuerpo,
avanza como una serpiente en plena calle,
trepa por las ventanas,
salta sobre los autos, se pone de pie,
resiste la dureza del asfalto,
se escurre por los puentes,
sus cinco ojos se alzan por los techos,
busca un punto en el azul para robar
el color que te falta,
pinta una cometa en el aire y luego la empina,
la enreda en el picaporte de tu puerta.
Yo sé que no estás
pero las manos son almas soberanas
y la mía insiste en tu piel,
rodea tu vacío, esculca, te regresa,
atrapa tu olor en el espacio en que fuiste materia.
Debajo de la tierra esta mano
siembra el cuerpo de tu ausencia.
Pájaros de papel
Pájaros cautivos en el papel,
pájaros anónimos, de colores desteñidos
que se corroen con su sola mención,
que huyen de tangentes y secantes,
de frases retorcidas, de trayectos previstos,
de palabras envenenadas con tildes y mayúsculas.
Pájaros inermes ante señuelos de poetas,
beben adjetivos y caen al instante
con su peso de hartura
en medio de vocales que se alargan como chicle
que los sujetan hasta el sofoco.
No quiero oír sus cantos truncos,
artificiosamente entonados en mitad de ayes, alabanzas,
floraciones falaces, ajenas indulgencias.
No resisto su vuelo rasante, sus aleteos en espiral.
Pájaros asfixiados entre línea y verso, entre polvo y tos,
que claman en árboles cercenados,
talados uno tras otro, para convertirlos en kilómetros de papel
donde han de aletear pájaros fallidos
para consuelo de tontos y vanidad de poetas.
Cómplice hasta el tuétano, hasta el bostezo,
los declaro libres de mi verbo empalagoso,
libres de mis manos, de mi caja de trucos.
¿Cómo haré para no mendigar un bocado de su aire,
para prescindir de su pluma
y evitar la tentación de recluirlos en mis versos?
Crítica literaria
Tan difícil hacer Poesía
con Eso
tan feo tan duro
Olivia Elías
Piden
que no use adjetivos.
Que abuso, agredo, hiero,
que asalto la inteligencia,
el sentimiento.
Advierten
que los adjetivos
asustan , mutilan, matan
la imaginación, el vuelo.
Aconsejan
utilizar verbos, nombres,
imágenes.
Una niña abre los ojos
en el hospital de campaña
y pregunta al médico
si sus heridas vienen de un sueño,
si una pierna suele brotar como la hierba.
Temo ensuciar el poema.
Quienes estallan los verbos
y asesinan los nombres,
los que desgarran imágenes
y ultrajan los sueños
solo me dejan adjetivos
para revelar y resistir.
Sí. Es forzoso
hacer poesía
con Eso
tan triste
tan duro
tan feo.
-Poemas del libro inédito Jardín de azares, finalista del premio Ana María Iza 2024.